Vaya, ¿a ti no te afecta? Cada mañana, cuando me miro al espejo, un escalofrío me recorre la espalda... Siempre acabo preguntándome, ¿quién eres tú...? Tú, que persigues la verdad, debes mentir a todos. Como este espejo que se supone debe reflejar fielmente la realidad, y en cambio, no refleja tu auténtica apariencia. Ai Haibara, capítulo 138-139: Un caso de asesinato y una última proyección.
Son los delfines... Ellos son las estrellas del mar. Todo lo contrario de los tiburones que huyen de las oscuras y frías profundidades del mar. Ai Haibara, capítulo 246-247: El misterio en la red.
Pensaba que sus ansias de justicia le hacían actuar sin pensar en las consecuencias de nada, en busca sólo de la verdad... Pero ahora resulta que él carga con toda la presión para no herir a nadie... Esa actitud tuya, típica de un joven temerario resulta enormemente interesante. Supongo que sabes que ese aroma tan puro la impregna a ella y a nosotros, incluso a ti mismo, y nos mantiene atados con el lazo de una solitaria y peligrosa esencia...Ai Haibara, capítulo 269-270: Recuerdo olvidado de un crimen.
Las flores son efímeras... Aunque uno, queriendo de buena fe protegerlas de la lluvia y el viento, las cubra con todo su empeño, las flores echan tanto de menos al sol que acaban marchitándose... Y, aun en caso de tempestad, esa protección resulta ser tan débil que no sirve como escudo... ¿Lo has entendido, Kudo? Ai Haibara, capítulo 269-270: Recuerdo olvidado de un crimen.
Tú mismo me dijiste que no debía escaparme, que no huya de mi destino. Porque tú me protegerás. ¿Es eso? Aunque te advierto que no soy la frágil princesita necesitada de ayuda que te imaginas. Ai Haibara, capítulo 279-280: El laberinto de Hooligan.
La imagen de los que se han ido permanece idealizada en el corazón de quienes les amaron. Es un recuerdo grabado a fuego que no desparece jamás. Ai Haibara, capítulo 304: ¡Temblorosos cuarteles generales de la policía!: 12 millones de rehenes (Especial 2 horas).
La puesta de sol... La muerte del astro rey tiñe el mundo de rojo sangre. Me pregunto cuántas veces más podré contemplar esa triste tonalidad... Ai Haibara, capítulo 312-313: La muñeca muerta al atardecer.
Eso no era amistad. Es como cuando compras un refresco en una máquina. Si metes monedas, logras apagar tu sed. Pero cuando no le das dinero, no sale nada. El corazón de las personas no se compra con dinero. Ai Haibara, capítulo 329-330: Amistad rota.
El mejor lugar para ocultar una hoja es el bosque. Ai Haibara, capítulo 435-436: Información recopilada en los muchachos detectives.
No debéis juzgar por las apariencias: "la más bella de las rosas siempre tiene espinas". Son precisamente las personas que parecen más inocentes las que traman peores cosas... Aunque de vez en cuando encuentras a una buena persona de verdad.Ai Haibara.
A veces hace falta valor para quedarse al margen. Ai Haibara.
Donde quiera que voy, no hay lugar para mí.Ai Haibara, película 05: Cuenta regresiva hacia el cielo.
Los humanos hacen daño pero no se dan cuenta que solo se lo hacen a uno mismo. - Ai Haibara